viernes, 3 de mayo de 2013

EL REPASO




Factores que facilitan que olvidemos lo estudiado
  • Memorizar sin comprender.
  • Falta de atención y concentración.
  • Falta de repasos o mala distribución de los repasos.
  • No conectar lo aprendido con lo que sabemos.
  • No utilizar lo aprendido.
  • Exceso de nerviosismo que hace que nos bloqueemos.
  • Poco interés en lo que aprendemos.
La curva del olvido nos dice:
Lo que significa que en las primeras horas después de haber estudiado se olvida más deprisa que en las posteriores.
La solución para contrarrestar el olvido consiste en una buena planificación de repasos.
El estudiar por la mañana o por la noche está en función de las características y de los hábitos personales.
Plan de repasos
Aprender un tema nuevo lleva su tiempo, en cambio realizar un repaso cuando la información la tenemos reciente es una actividad breve. Sin embargo, si no efectuamos los repasos olvidaremos la mayor parte de la información y tendremos que aprender prácticamente de nuevo.
Atendiendo a la curva del olvido, necesitaremos repasar más en los momentos más cercanos al momento de estudio.
Distribuye tu tiempo contando con los repasos. Un ejemplo de distribución de repasos adecuado sería:
Primer repaso: Repasar el mismo día.
Segundo repaso: Repasar al día siguiente.
Tercer repaso: Repasar a la semana siguiente del segundo.
Cuarto repaso: Repasar al mes del último repaso.
Esto facilita que se consoliden los conocimientos en nuestra memoria y que los repasos sean cada vez más breves.
Si esperamos a tener estudiada toda la materia para empezar a repasar, muchos de los conocimientos aprendidos ya los habremos olvidado, con lo que el tiempo invertido en repasar será mucho mayor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario